SÁBADOS 12,30 A 14,30 HORAS.

SÁBADOS 12,30 A 14,30 HORAS.
Pin It

Widgets

Los desmontes en Entre Ríos no se detienen

Antonio E. Silveyra | octubre 15, 2008 | 0 comentarios

En menos de 10 años se perdieron un millón doscientas mil hectáreas de monte nativo en la provincia y aún no termina de realizarse el ordenamiento territorial para preservar ciertas áreas de la tala indiscriminada de especies vegetales, señaló el titular del Foro ecologista, Daniel Verseñasi, quien expresó que “podría hacerse una historia sobre la hipocresía” en el abordaje de esta problemática.
Verseñasi instó a la dirección de Recursos naturales a que realice una urgente convocatoria a la comisión de Monte nativo para tratar cuanto antes el flagelo de los desmontes en la provincia, pero dijo que al momento no recibieron ninguna respuesta desde el organismo y afirmó: “ellos (los funcionarios) están en falta”.

El ambientalista manifestó que sólo quedan 700 mil hectáreas de estos bosques en la provincia e indicó que se trata de un “desastre natural”, ya que en menos de 10 años se perdieron un millón doscientas mil hectáreas, hecho que tiene y tendrá consecuencias irreversibles en el ecosistema.

Asimismo subrayó que la destrucción de los montes provoca una pérdida del hábitat de las especies animales y vegetales y también un cambio significativo en el régimen de lluvias. En tanto, al fenómeno de la deforestación se suma la degradación del suelo que se produce tanto por la tala indiscriminada como por el pastoreo intensivo de los animales, y da como resultado un ambiente empobrecido.

Juguemos en el bosque

Desde la dirección de Recursos naturales atribuyeron la imposibilidad de frenar los desmontes a la falta de reglamentación de la ley nacional 26.331 de presupuestos mínimos para bosques nativos, aunque según Verseñasi: “hay una acción política desconsiderada de los propietarios y de los gobernantes”. En tanto, el 10 de abril, la cámara de Diputados provincial dio media sanción al proyecto de ley de adhesión a la ley nacional, el expediente ingresó al senado el 9 de abril y logró la sanción como ley provincial.

El objetivo era producir la suspensión de la tala, por lo que se estableció el plazo de un año de prohibición de la actividad, mientras cada provincia debía elaborar un plan de ordenamiento territorial para delimitar las zonas aptas para desmontar, pero esto nunca ocurrió. “La gente no toma bien la prohibición, y cuando se impiden los desmontes, estos se incrementan”, afirmó el director de Recursos naturales de la provincia, Conrado González, en declaraciones periodísticas que consignan que Entre Ríos es la quinta provincia del país en superficie total de monte nativo, mientras Santiago del Estero tiene seis millones de hectáreas.

Corazón de madera

“El Foro ecologista realizó una presentación de amparo por los desmontes que resultó favorable y advertimos a algunos propietarios de tierras que estaban construyendo su propia destrucción”, señaló Verseñasi. “Les anticipamos que si el precio de la soja bajaba pasarían de ser beneficiarios a deudores, y en aquel momento se nos rieron en la cara, pero ahora cortan las rutas y se quejan del aumento de los insumos”, cuestionó.

En ese sentido, desmontar sin autorización no es un delito sino una infracción a la ley nacional, por la que se paga una multa, pero no hay garantías de que la conducta no vuelva a repetirse. El monto a pagar se establece en base a la cantidad de hectáreas y a la maquinaria empleada, entre otros puntos. Sin embargo, la problemática sigue vigente y a mayor prohibición mayor es la reiteración de la tala, sobre todo en pequeñas superficies.

“El monte nativo sufrió una horrible derrota fue liquidado en Entre Ríos y con ello se cercenó la posibilidad de que la provincia sea una fuente de producción agrícola”, sentenció Verseñasi.

Archivado en::

0 comentarios